miércoles, 20 de enero de 2010

HAITÍ Y VENEZUELA


Qué ironías tiene la vida. Hugo Chávez, el presidente venezolano, se ha atrevido a decir que si viviera en Haití, la oposición lo habría culpado a él del terremoto. Ni siquiera ha respetado que los miles de cadáveres de los haitianos estaban aún calientes. Esto obliga a dar respuesta al cínico tirano.

Hoy estos dos países, Haití y Venezuela, atraviesan por simultáneas tragedias, una causada por la naturaleza, y la otra por el hombre. El primero es uno de los países más pobres de América. El otro era hasta hace unos pocos años, uno de los países más ricos de la región.

En efecto, este paralelismo dramático nos hace pensar en ese humilde y pobre pueblo haitiano, hoy viviendo una auténtica desgracia natural producida por un terremoto de más de 7º en la escala de Ritcher. A estas horas del miércoles, una semana después de la tragedia se desconoce el número de muertos y heridos, pero por las imágenes que nos llegan a través de las televisoras, el daño es gravísimo, como profundo el dolor de ese pueblo castigado por las fuerzas naturales.

En el mismo mar Caribe, unos cuántos kilómetros más al sur, otro pueblo, el venezolano, sufre la desgracia de haber llevado al poder a un militar golpista y corrupto, Hugo Chávez, que inspirado en el social comunismo cubano, ha lanzado a nuestro país, al precipicio de la miseria mas absoluta, con niveles de pobreza que aumentan día a día, sin luz, sin agua, sin alimentos de la dieta básica que escasean un día si y el otro también, y con unos niveles de inseguridad ciudadana que arrojan cifras de espanto. El año 2009 se produjeron más de 15.000 homicidios en Venezuela.

Chávez continúa su trabajo devastador, al igual que el terremoto de Haití, no deja piedra sobre piedra. Ha expropiado a los industriales, quebrado a los empresarios, auyentado a los inversores, invadido fincas, perseguido y metido en la cárcel a los opositores. Ha violado los derechos humanos de miles y todo aderezado con un discurso de reivindicación social y lucha contra el capitalismo, mientras él y los suyos se han enriquecido de manera grosera con la corrupción y a costas de las arcas públicas.

Son dos desgracias que se están viviendo en paralelo. Chávez aprovechará lo del terremoto de Haití, enviando ayuda humanitaria, para aparecer ante los ojos del mundo como un luchador solidario.

Entre tanto sus fuerzas armadas persiguen a quienes en Caracas y otras ciudades del país, no han tenido otro camino que aumentar el precio de los productos ante la bestial devaluación del 100% de la moneda nacional.

Así también engaña a los suyos, apareciendo como un defensor de los pobres, cuando él es quien ha generado toda la desgracia que hoy sufre la población venezolana.

En su paso destructor ha logrado quebrar a PDVSA, la empresa estatal petrolera. Por eso tuvo que devaluar, porque esta era la única manera de obtener los recursos que necesita para continuar con su loca carrera hacia el comunismo a la caribeña.

Al final el resultado es dramático para los dos pueblos. Para Haití, enfrentarse a esa dura realidad de la pérdida de decenas de miles de seres humanos, familiares, amigos, vecinos, creyendo que todo es una pesadilla, pues no era posible pensar que se podía esta peor.

En Venezuela, la dramática realidad de haber apostado por un caudillo, que en 10 años ha acabado con toda la riqueza de un país que hace unos años fue el ejemplo de democracia y libertad para muchos otros pueblos, y que hoy está en las garras de un tirano destructor.

Ambos, la naturaleza y el hombre, son brutales cuando se proponen destruir.

Williams Cárdenas Rubio-Vargas
13.01.2010

1 comentario:

  1. http://www.youtube.com/watch?v=6X2vChJZACE

    http://www.youtube.com/watch?v=GiCJePS1fok
    http://www.youtube.com/watch?v=_O4InkK9bwc
    Recomiendo a todos ver estos videos y que no se dejen engañar por manipulaciones que solo buscan distorsionar la verdad

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