La Delegación del Gobierno ha rechazado la petición de una convocatoria de concentración contra la visita de Hugo Chávez.
La denegación se basa en una cuestión formal, puesto que la Ley indica que la solicitud debe presentarse con diez días de antelación.
Es notorio que, en muchos casos, no se tiene en cuenta, en aras del espíritu de la Ley, tal criterio. Por ejemplo, en las convocatorias de repulsa al terrorismo y a sus atentados. Con toda lógica, se celebran el mismo día, al día siguiente o, en cualquier caso, antes de los diez días.
La fecha de la visita de Hugo Chávez se ha conocido con menos de diez días de antelación. Ese hecho sugiere que se ha querido evitar al tirano la protesta.
En primer lugar, se solicitó poder celebrar la concentración ante el Palacio de La Moncloa y, ante su denegación, en la Plaza Mayor, de nuevo rechazada por una estricta argucia.
El espíritu de la Ley, de la Constitución, es que el derecho de manifestación es absoluto y radica en el ciudadano.
Por ello, tendrá lugar una concentración espontánea el próximo viernes 11 a las 12 horas en la Plaza Mayor de Madrid contra la visita de Hugo Chávez.
En esa concentración se protestará por las tremendas agresiones a la libertad de expresión, por el odio a todo lo español que difunde Chávez y se exigirá que no se vendan unas armas que se utilizan para oprimir y reprimir al pueblo venezolano y a los españoles residentes en Venezuela.
No hay comentarios:
Publicar un comentario